Responsabilidad social

Mejorar el medio ambiente reduciendo el desperdicio y optimizando la cadena de suministro

Responsabilidad social

Mejorar el medio ambiente reduciendo el desperdicio y optimizando la cadena de suministro

¿Sabía que el desperdicio anual de productos frescos se estima en $900 000 millones? Al mismo tiempo, de acuerdo a las estadísticas del hambre a nivel mundial, 1 de cada 9 personas (más de 821 millones de humanos) se acuesta todos los días con el estómago vacío. Debemos hacer más.

Debemos hacer más.

Promover las metas de desarrollo sostenible

Nos enorgullecemos de abordar dos de las Metas de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas: Cero hambre y Consumo y producción responsables.

Reducir el desperdicio en el cultivo de frutas y hortalizas

En Clarifruit tomamos muy en serio nuestra responsabilidad social de hacer una contribución ambiental al desafío del desperdicio mundial de productos frescos. Con nuestra solución, que aprovecha los big data y análisis, los involucrados en toda la cadena de suministro de productos frescos pueden medir con precisión y consistencia la calidad, tomando decisiones inteligentes sobre sus productos que conducen a reducir el desperdicio.

Optimizar la cadena de suministro, desde agricultores y empresas comercializadoras, hasta mayoristas y minoristas

Actualmente, el 20 % del desperdicio de productos frescos ocurre en el segmento del agricultor. En Clarifruit, tenemos como meta reducir este desperdicio en 20 %, lo que a su vez se traduce en una reducción general casi del 2 %. Esto podría ahorrar a la economía hasta $18 000 millones anuales, y también democratizar la cadena de suministro, apoyando a los agricultores y haciendo que el sector sea más equitativo para todos.

Definir una norma global para las frutas y hortalizas

Anualmente se realizan aproximadamente 400 millones de transacciones en el sector de las frutas y hortalizas. Sin embargo, el 25 % de estas no se desarrolla según lo planificado, debido a que un 5 % es rechazado y 20 % se renegocia a menor precio. La inteligencia artificial elimina las conjeturas de la inspección de control de calidad de las frutas y hortalizas, facilitando la normalización global de la calidad. Si se acepta ampliamente, esta normalización puede apoyar todas las etapas de la cadena de valor y permitir que todos experimenten el escenario de mejor caso: la mayor calidad del producto con total correspondencia y a un precio justo.

Scroll al inicio