Sin categorizar

Se cree que la agricultura y la ganadería son las profesiones más antiguas del mundo, pero ¿sus procesos de control de calidad siguen en la edad de piedra? Demos una mirada a los métodos tradicionales que todavía se utilizan en las grandes empresas del mundo, y cómo las innovadoras usan las últimas tecnologías para digitalizarse y modernizarse, lo que reduce el desperdicio y aumenta los ingresos.

Uno de los problemas más apremiantes del sector de la cadena de suministro de frutas y hortalizas frescas es la falta de un lenguaje común. Cada consumidor proporciona una lista completa de especificaciones, que van desde color, forma y tamaño, hasta niveles Brix y tolerancia a los defectos. Ese archivo PDF podría tener hasta 20 páginas, y la cantidad de clientes de las empresas comercializadoras y mayoristas promedio puede ser de 50 a 100. La norma A de un cliente es la C del otro. Se puede ver el desafío que esto presenta. Cuando desarrollamos la plataforma Clarifruit, tuvimos todo esto en mente y creamos una solución inteligente que permite a las empresas superar la complejidad de los varios lenguajes. Así es como funciona.

Los minoristas están recibiendo mucha mercancía y, obviamente, el consumidor no comprará todo. Cuando profundizamos específicamente en los productos frescos, alrededor del 12 % de las frutas y el 11,5 % de las verduras llegan a la tienda de comestibles y nunca se venden, lo que se traduce en un duro golpe para los resultados de los minoristas. Entonces, ¿cómo puede la tecnología ayudar al minorista inteligente a salir adelante?